Herramientas para darse una mano a uno mismo.

Por Diego Delfino

Christine Raine es una persona excepcional, conversar con ella fue un gusto enorme. Hay gente que tiene un don especial, una capacidad muy particular para generar confianza, bienestar y paz. Raine es una de esas personas.

A lo largo de nuestra conversación procuré recordar algunas de las herramientas que me ayudaron en momentos complicados de mi vida. No quisiera que se tomen como remedios infalibles ni mucho menos, son simples sugerencias que pueden o no ser de ayuda, dependiendo de cada caso.

Una dieta sana, ejercicio frecuente y una vida social activa son prácticas mucho más ampliamente recomendadas y por buena razón. En mi caso particular, la terapia, la lectura y la música fueron bastones claves de aprendizaje, progreso y libertad. Ojo, entender que cada persona es distinta es clave para salir adelante, ese proceso se puede llevar en el acompañamiento de la terapia, de modo tal que poco a poco uno pueda irse conociendo mejor.

Así como diferentes estrategias pueden ayudar a abordar un ataque de ansiedad, diferentes herramientas pueden ayudar a echar palante en un trabajo de reconstrucción. Muy seriamente les digo: a algunas personas les funciona Coelho, a otras la religión, a otras desarrollar una afición por conversar con ardillas. Todo eso está bien. Que no sea el prejuicio una soga al cuello, cada quien es cada quien y listo. Dicho lo dicho, esta es una lista de libros que considero fueron claves en mi proceso, ojalá encuentren valor en alguno de ellos.

— El hombre en busca de sentido. Viktor Frankl.

— Maybe you should talk to someone. Lori Gottlieb.

— How to do the Work. Nicole LePera (cualquier libro de ella, recomendado, así como seguirla en redes).

— The courage to be happy (and disliked) Ichiro Kishimi y Fumitake Koga.

— The Myth of Normal: Trauma, Illness, and Healing in a Toxic Culture. Gabor Maté.